Esta nota apareció el sábado 1 de agosto en CEINPOL: Editorial desde Alemania Bulgaria in a Nutshell Por: Geraldina González de la Vega Para Juan. Por azares de la vida y del amor Bulgaria se colocó en mi mapa cardiaco hace apenas unos años. Este verano será mi primera visita a este enigmático país en el Mar Negro que desde su oficial existencia en 681 no ha dejado de luchar por formarse y conformar su identidad. Habitadas aquellas tierras por los tracios y después por los griegos, Bulgaria traza su identidad desde el año 3500 a.C. En aquélla época griega, se fundan las ciudades costeras, entre ellas Mesembria, hoy Nessebar. Después, en 359 los macedonios hacen suyas tierras entre el Danubio y las montañas Rodópe, fundado Filipópolis, hoy Plovdiv. En el siglo I se incorporan al Imperio Romano y se dividen las tierras de lo que hoy conocemos como Bulgaria, entre Tracia y Moesia y se funda la capital Serdica, hoy Sofia. Al morir Teodosio, se divide finalmente el vasto Imperio Romano, y Moesia y Tracia pasan a formar parte del Imperio Romano de Oriente. Otro azar de la vida es que viva yo hoy en la capital del Imperio Carolingio, ciudad que vió a 32 empreadores coronarse: Aquisgrán. El primer imperio búlgaro se forma en el siglo VII, después de que sus tierras se vieran azotadas por invasiones bárbaras de todos los lugares de Europa. Los eslavos y los búlgaros se establecen y fundan bajo el rey Asparuh un imperio que fué reconocido por Bizancio en 681. El emperador Justiniano II otorgó el título de Chan al segundo emperador Tarvel, palabra equivalente a César. Bajo el reinado de Jan Kubrat, Bulgaria adquiere un poderío sin igual, llega a dominar gran parte del territorio entre el Mar Negro y el Adriático, desde los Cárpatos hasta el Egeo. Bizancio intentó invadir Bulgaria en 811, solamente para regalarle a Krum la cabeza de su emperador Nikóforo. Boris I se convierte al cristianismo y establece el eslavo como la lengua de liturgia, gracias a ello, se hace fácil la expansión del imperio hacia Rumania, Serbia y Macedonia. Más tarde, el emperador Simeón I quizo unificar los imperios búlgaro y bizantino. Evidentemente estos sueños de grandeza fueron rápidamente aplastados por Basilio II, que hace lo contrario, conquista Bulgaria y la incorpora a Bizancio. Entre 1018 y 1185 Bulgaria pertenece al Imperio Bizantino. El segundo imperio búlgaro se funda en 1185 y durará hasta 1396. Una rebelión organizada por unos hermanos con ímpetus nacionalistas logró extender el territorio hasta el Danubio, el mar Negro y la región montañosa de Stara Planina. Bajo el reino de Iván Asen II el imperio proliferó y se rompió con la Iglesia en Roma, creándose el patriarcado ortodoxo. En 1396 Bulgaria fué invadida por los turcos otomanos y cayó en sus manos. Entre los siglos XIV y XVIII Bulgaria estaría dominada por el imperio otomano y la obligaría a convertise al Islam. Era llamada el beyerlik de Rumili. Hasta que en 1768 los rusos invaden el imperio y los griegos, hacen lo mismo, despertando con ello el espíritu nacionalista de los búlgaros, aunado a las corrientes occidentales del liberalismo. Gracias a ello se animan los búlgaros a luchar contra los otomanos en 1821, sin éxito. El sentimiento nacionalista estaba instalado, y desde las ciudades que integran hoy la provincia de Plovdiv se fué perpetrando la rebelión, en abril de 1876 se levantaron en las ciudadanes de Batak, Perushtitsa y Bratsigovo, siendo cruelmente aplastados nuevamente por los turcos. Después vendrían la rebelión de Bosnia en 1875, que fué aplastada por los otomanos. Los rusos y algunos europeos condenaron la barbarie turca, que sirvió como pretexto para la Guerra Ruso-Turca de 1877-78 y que culminó en la derrota de los otomanos. El Tratado de San Stefano de 1878 creó el principado autónomo de Bulgaria, mismo que se dió una bien moderna Constitución en 1879. Posteriormente, la Conferencia de Berlín entre las potencias de esa guerra limitó el territorio búlgaro por temor a la efervescencia en los Balcanes, lo que provoca la inestabilidad y la inconformidad del pueblo búlgaro. Sigue una historia de tronos y abdicaciones que se ve interrumpida por la Guerra de los Balcanes en 1912. Bulgaria lucha contra los otomanos junto con Serbia y Grecia, logran rescatar territorios, entre ellos, Adrianópolis, hoy Edirne en Turquía. Pero a la hora del reparto, no logran ponerse de acuerdo los tres aliados, y se hacen la guerra entre ellos. El Tratado de Londres, el de Bucarest y el de Constantinopla los tres de 1913, fijan los límites de Bulgaria, obligándola a ceder territorio. En 1914 el homicidio del Archiduque Fernando José en Sarajevo dispararía de nuevo la inestabilidad en la región, obligando a Bulgaria a tomar partido. Se aliaría con Austria-Hungría y declararía la guerra a Serbia, su vecina. Bulgaria formaría parte del Frente de Oriente, con lo que después se benefició y recuperó territorio perdido en 1913. Con el armisticio de 1918 su rey Fernando II se ve obligado a abdicar a favor de Boris III, su hijo. El Tratado de Neuilly de 1919 obliga, nuevamente a Bulgaria a devolver territorios a Rumania y Serbia (Macedonia) y a Grecia. Durante el nacimiento del comunismo, Bulgaria sufre la breve dictadura campesina de Stamboliski, quien es asesinado. En 1934 el Rey Alejandro I de Yugoslavia es muerto, lo que provoca en Bulgaria un Golpe de Estado y el establecimiento de una dictadura personalista en 1935 en manos del rey Boris III, lo cual ganó las simpatías nazis. En la Segunda Guerra Mundial, Bulgaria obtiene de nuevo el territorio de Dobrudja. Se alía con Alemania y obtiene Macedonia, territorios serbios y Tracia. Boris III se resistió a hacer la guerra contra la U.R.S.S. y a entregar a los búlgaros judíos, como era el deseo alemán. Boris III muere en circunstancias sospechosas, quedando su hijo menor en el trono, Simeón II de apenas 6 años. De ésta circunstancia se aprovecharían los alemanes. En 1944 la U.R.S.S. declara la guerra a Bulgaria y ésta sufre una gran derrota, en 1947 es ocupada por las fuerzas soviéticas quienes instalan un gobierno comunista. El Partido Comunista de Bulgaria se hace del gobierno y funda una República Popular. El Tratado de Paris que pone fin a la guerra en 1947 obliga a Bulgaria a devolver los territorios obtenidos. El primer gobierno comunista cae en manos de Chervenkov, quien será seguido por Zhivkov. Años de oscura "dictadura del proletariado" cancelaron sueños y libertades de los búlgaros. Gracias a la modernización soviética con la Perestroika, en noviembre de 1989 el dictador Jikov fué cesado y sustituído por Petar Mladenov quien reforma el Partido Comunista Búlgaro y lo convierte en el Partido Socialista, que junto con otros partidos reforma las instituciones. Bulgaria camina hacia la democracia, finalmente. En 1990 se celebran las primeras elecciones libres, en 1991 se promulga la Constitución, bajo la cual se eligió en 1992 a Jeliou Gelev como Presidente por la Unión de Fuerzas Democráticas. Debido al desmantelamiento del régimen comunista y la privatización de tierras y empresas, Bulgaria sufrió de enormes índices de desempleo y falta de competitividad. Había un gran descontento. La democracia cayó pesada, vino un periodo de inestabilidad política en donde los gobernantes caían por incapaces o por corruptos. En 2001 Simeón II, aquel pequeñito de 6 años que obtuvo el trono durante la Segunda Guerra Mundial, regresó a Bulgaria y formó el partido Movimiento Nacional Simeón II, quien ahora lleva un apellido simpático: Sakskoburggotski (que en realidad es la casa a la que pertenece Sachsen-Coburg-Gotha). Simeón II ganó las elecciones y se convirtió en Primer Ministro. En 2002 fué electo presidente Georgi Parvanov, quien fué reelecto en 2006 por cinco años más. Simeón II fué sustituído por medio de las elecciones de 2005, que dieron el triunfo al partido socialista de Sergej Stanisev. El mismo fin de semana que hubo elecciones en México, los búlgaros también salieron a las urnas. Después de escándalos de corrupción y la retirada del fondo de ayuda europeo por ello, el 5 de julio pasado, los ciudadanos decidieron optar por cambiar de gobierno. Stanisev obtuvo apenas 7% de los votos. El Partido Ciudadanos para el Desarrollo Europeo de Bulgaria (GERB en búlgaro) obtuvo la mayoría en la Asamblea, 115 escaños de 240. Boiko Borisov será el próximo Primer Ministro. Bulgaria es una república parlamentaria, cuenta con un Jefe de Estado o Presidente electo de forma directa cada cinco años con posibilidad de reelegirse una vez y con funciones acotadas. Un Primer Ministro electo vía Parlamento y que es el jefe de Gobierno y de gabinete. Bulgaria es un estado central dividido en 28 provincias. Su Poder Legislativo se representa en una Asamblea Nacional o Narodno Sabranie, con 240 escaños con diputados electos por 4 años. Su Poder Judicial está representado en cortes locales, regionales y una Suprema de casación y una Corte Constitucional. A mi regreso, les narraré que ví y que sentí. Por lo pronto, imagínenme ahora en ese misterioso territorio, bañado por el Danubio y el Marica, que mira hacia Oriente desde las costas del Mar Negro, arrugada por los balcanes, que sostiene sus tierras con la columna de Stara Planina y los Rodópe, que bajan en las planicies Tracias, encarpetadas de girasoles o derramadas en valles de rosas. Estoy ahora viendo –ya no imaginando como cuando escribo esto - esa tierra fundada por los descendientes de Atila y de Jan Krum, cuya sangre corre por las venas de mi pequeño Juan. Dovizdane! Hasta la Vista! |
lunes, 3 de agosto de 2009
Bulgaria in a nutshell
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