viernes, 23 de enero de 2009

Mi teoría de la conspiración vaticana


Casualmente esta semana me ha tocado leer dos artículos (aquí, aquí) en dos diarios muy diferentes sobre una supuesta campaña agnóstica contra dios. Ajá. así como lo leen. En Italia y en España concretamente, en los autobuses se pueden leer anuncios como: “Probablemente Dios no existe. Deja de preocuparte tanto y goza de la vida” y "Las malas noticias son que Dios no existe, las buenas son que no lo necesitas"

Me parece verdaderamente absurdo creer que un grupo de agnósticos o de ateos esté intentado hacer proselitismo. En realidad lo que define a quien no cree en dios, o no quiere creer, o cree que no existe, es la libertad. El agnosticismo o el ateísmo no necesitan propaganda.

El león cree que todos son de su condición y a mi me parece* que esta propaganda está orquestada por el propio Vaticano para despertar el enojo de sus bases y el despertar de una nueva ola cristiana que gane por encima de aquellos inmorales no creyentes. El ateísmo no necesita propaganda como la necesita la religión. Y todavía los obispos españoles se hacen los ofendidos (es "una ofensa a los creyentes y una blasfemia")...Pero por qué? En un mundo democrático uno es libre de expresar lo que quiera. Que contraten espacios públicos y pongan "Se equivocan blasfemos, dios sí existe" y asunto arreglado.
Quienes no creemos en dioses ni practicamos ninguna religión tenemos como principio básico el liberalismo, laissez faire. De cuándo acá vendría un grupo de no-creyentes a querer imponer su punto por medio de propaganda en autobuses cuando lo que pelea(mos) es la libertad de no creer y de que no se nos esté imponiendo una creencia.

Me parece que el Vaticano cayó en su trampa. La creencia de muchos cristianos de que quienes no creen en un dios y no practican una religión somos malos per se, se hace patente en el mensaje de "vive la vida". Quien no cree en un dios y un juicio final, finca su moralidad en la razón y eso no quiere decir vive la vida, quiere decir, igual que un creyente, que hay actos buenos y hay actos malos, la diferencia es que éstos estan definidos por la razón y no por un ser superior.

Si me equivoco, se trata de agnósticos dudantes, que más que querer convencer a los demás quieren convencerse a sí mismos.

Vaya!
El Vaticano se promociona ahora en You Tube. Bravo Ratzinger! Ahora sí podemos decir que formas parte de la posmodernidad, porque definitivamente la modernidad te la saltaste...
P.S.
*He leído ahora en El País aquí que "Los autobuses ateos fueron idea de una periodista del rotativo inglés The Guardian Ariane Sherine, y empezaron a circular por las principales ciudades inglesas para después extenderse a Estados Unidos y a Australia. El pasado 12 de enero llegaron a Barcelona, y ya hay un acuerdo para que circulen por Madrid a partir de la semana que viene."
En fin. Las cosas que se ven en este mundo! Aún así, sostengo mis argumentos contra el proselitismo de los no-creyentes.

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