martes, 8 de septiembre de 2009
Mexicanos egoístas y menores de edad
Nexos publica un artículo de José Antonio Aguilar, México: Individualista y Antiliberal en donde analiza los resultados de la la Encuesta Nacional sobre Cultura Política y Prácticas Ciudadanas (ENCUP) 2008 realizada por SeGob e INEGI. Aguilar saca en conclusión que los mexicanos somos individualistas, más bien egoístas diría yo, para no confundir con el individualismo liberal. Y Antiliberales, o más bien, con ansias paternalistas diría yo, en el sentido de que nos gusta que "papá gobierno" nos resuelva todos y cada uno de nuestros problemas, a pesar de que el 79% de los encuestados confiaba poco o nada en los partidos políticos (!) La realidad es que los mexicanos somos ápaticos y mientras cada uno de nosotros mantengamos nuestro status quo o lo mejoremos, nos viene valiendo un reverendo pepino lo que suceda con los demás, vaya, "para eso está el Gobierno para ayudar a los jodidos, las leyes duras para castigar a los malos, y para resolverme mis problemas y no aplicarme las leyes, porque yo, soy un buen mexicano, muy patriota y trabajador." Y claro, el típico: "usted Sr. fan de Michael Jackson, póngase a trabajar en lugar de andar bailando thriller!"
Son de llamar la atención los comentarios en la página de Facebook de Felipe Calderón, pues la gran mayoría son agradecimientos, porras y palabras como si el Presidente fuera el papá de los mexicanos durante su sexenio. Y como si la oposición fuera un mal, pero como si lo ideal sería todos unidos bajo una misma idea, una misma política, ni en los mejores tiempos de la RDA! "contra la oposición, Sr. Presidente, usted saldrá adelante!" Un temible anhelo totalizante y un patrioterismo que ralla en lo cursi. Para mayor crítica sobre el patrioterismo mexicano ver mi nota del sábado en CEINPOL, la encuentras columna derecha ---->
Hay que agradecerle a AMLO, sus seguidores y a Ugalde este número: el 65.8% no cree que las elecciones en México sean limpias. A lo que Aguilar dice "Es decir, el daño a la credibilidad de las elecciones fue brutal. Nos regresa a niveles de hace tres lustros."
Sobre el título, dice Aguilar:
"Un rasgo que esta y otras encuestas confirman es que los mexicanos abrazan un peculiar individualismo. No se trata del individualismo democrático que mencionaba Tocqueville al describir la sociedad norteamericana, sino de una mentalidad libérrima, que hace del individuo no un ciudadano sino una especie de pionero en el salvaje oeste. Si los mexicanos desconfían de las instituciones del Estado (49% cree que el gobierno “se impone” en lugar de consultar), también lo hacen en gran medida de las otras personas. Un 71% de los encuestados pensaba que la mayoría de la gente sólo se preocupaba por sí misma y un 84% estuvo de acuerdo con la frase “si uno no se cuida a sí mismo la gente se aprovechará”. Los individuos que pueblan esta sociedad civil, como los hombres en el estado de naturaleza de Hobbes, ven amenazas en los demás: temen ser discriminados por diversas razones (clase social, edad, etcétera), creen que la gente no cumple la ley (64%) y que la mayoría de las personas respeta poco los derechos de los demás (66%).
Tal vez por eso los mexicanos tienen un anhelo estatista que da cuenta de su antiliberalismo: un 78% estaba de acuerdo con que “el gobierno intervenga lo más posible en la solución de los problemas de la sociedad”. Sólo el 14% creía que lo mejor era que la sociedad tratara de resolver sus propios problemas. Esta expectativa tiene su contraparte en una concepción de indefensión e impotencia social. A ocho años de la alternancia en la presidencia, el cambio político no ha significado empoderamiento ciudadano. En efecto, un 60% creía que los ciudadanos tenían poco o nada de poder para cambiar las cosas en México. En 2001, poco después de que el primer presidente de oposición tomara posesión, la cifra era casi idéntica: 57% creía que influían poco o nada en la vida política del país."
Anulistas y otros ciudadanos del ANCA, ya saben por dónde atacar....
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