Con la aprobación de la reforma al Código Civil para legalizar los matrimonios entre personas del mismo sexo y la decisión de no limitar las adopciones se abre una nueva etapa para el D.F.
Me parece interesante publicar los resultados de un estudio realizado en Alemania sobre las familias arcoiris.
Un Estudio Alemán:
En se realizó un estudio por parte del Ministerio de Justicia Federal Alemán para determinar si los menores que vivían con padres homosexuales vivían bien, mejor o peor que aquellos que viven en familias tradicionales. El estudió fué realizado apenas a dos mil menores, pues es el número de menores en "familias arcoiris" que se tiene registrado en Alemania. Se sabe que hay muchos más, pero que sus padres no han legalizado su unión. Como ya anoté arriba, en Alemania se permite la adopción individual a) y la del hijo de la pareja c).
Los resultados muestran que:
• Las parejas homosexuales tienen una muy buena relación con sus hijos y que ésta se funda en la seguridad y el cuidado. Dan gran valor a los límites pero evitan las sanciones fuertes.
• El clima en las familias arcoiris es muy positivo, dice el estudio, pues se puede hablar abiertamente de todo y todos se preocupan por todos. Las familias se estresan menos y llegan menos a los pleitos.
• En las familias arcoiris la división de roles y tareas es igual, por lo que el ambiente en casa es más flexible y democrático que en el de las parejas heterosexuales. El reparto de tareas y administración del hogar se realiza por intereses y no por principios fijos o roles.
• Para el cuidado de los hijos, intervienen de la misma forma los dos, por ejemplo para llevarlos a la escuela o al médico o a actividades extra-escolares. Dependiendo de los intereses de los menores y de los padres, éstos van con ellos a determinadas actividades.
• En la mayoría de los casos los padres homosexuales dan un gran valor al hecho de que sus hijos tengan relación con personas del otro sexo para que tengan modelos y roles a su alcance.
• Fuera de las familias, muchos de los menores tienen contacto, en la medida de lo posible, con sus padres biológicos.
• Los menores que viven en familias arcoiris, según el estudio, se desarrollan personal, escolar y profesionalmente bien, así como en los aspectos emocional y de competencia social, se muestra que no tienen ningún problema.
• No se encuentran indicios para una mayor disposición a la depresión, al contrario, dice el estudio: los menores se desarrollan parcialmente mejor que los de las familias tradicionales pues muestran una mucha más alta autoestima y mayor autonomía en la relación con sus padres que los menores de la misma edad de familias tradicionales.
• Los menores y jóvenes reconocen en su desarrollo una influencia positiva por haber crecido en una familia arcoiris, dicen que ven en su tipo de familia un desarrollo a una mayor apertura y tolerancia e individualidad. Sin embargo, aceptan tener miedo a las discriminaciones y reacciones negativas de otros.
• La mayoría de las familias arcoiris han experimentado que entre más abiertamente hablan de su familia, más abierta y positiva es la reacción de los demás.
• Cada dos madres o padres homosexuales han vivido algún tipo de rechazo.
• Cada diez ha vivido algún tipo de discriminación con los burócratas.
• A pesar de que la mayoría de las burlas se presentan en la escuela, los padres de familias arcoiris informan sobre experiencias positivas pues al final se aceptan las formas distintas de vida.
• A pesar de que cada tercera familia arcoiris se siente insegura de informar su constelación familiar al personal de la escuela, en cada seis escuelas o guarderías las familias arcoiris o parejas homosexuales no son un tema.
• Dos tercios de expertos dicen que existe una necesidad concreta de cambiar el marco de las condiciones de los menores con las uniones homosexuales. Los menores son discriminados con respecto a los menores de familias tradicionales, porque sus padres no pueden tener el mismo derecho a adoptarlos ni tienen los mismos drechos financieros.
En resumen, el estudio muestra que la orientación sexual de los padres no es una garantía ni ningún impedimento para ser un buen padre o formar una familia en donde se busque el bienestar del menor.
El estudio fué realizado por encargo del Ministerio de Justicia Federal por el Instituto Bávaro de Investigación Familiar de la Universidad de Bamberg y fué complementado con un estudio psicológico de menores del Instituto Bávaro de Pedagogía Temprana en Munich.
Si el problema no es el desarrollo de los menores adoptados, ¿Entonces cuál es?
0 comentarios:
Publicar un comentario