martes, 27 de abril de 2010

Más sobre velos y crucifijos.

Acá en Letras Libres Daniel Gascón escribe acerca de la Burka, de los Crucifijos y todo este lío que también se debate ahora en España:

"Si la alumna hubiera decidido ir desnuda o vestida de Batman y la hubieran expulsado, probablemente quienes defendían su derecho a la educación habrían hecho algún matiz: quizá algunos le habrían sugerido que se vistiera, o que fuera a un centro educativo donde la desnudez o los trajes de Batman estuvieran permitidos. Pero, por lo visto, como se trata de una cuestión religiosa, hay que emplear reglas distintas."

" lo ha explicado muy bien la escritora iraní Chahdortt Djavann en Abajo el velo. Es un elemento de segregación que afecta a la mitad de la población y contraviene el más leve concepto de igualdad. Borra del mapa a las mujeres como seres humanos y las convierte en un objeto sexual y de intercambio. Clasifica en esa categoría a las niñas cuando todavía son menores de edad."

La misma autora cree que:
"No es en nombre de la laicidad que hay que prohibir llevar el velo a las menores, en la escuela o en otro sitio, sino en nombre de los derechos del hombre, y en nombre de la protección de menores."

El autor dice algo fundamental:
El pedigrí de cualquier costumbre es menos relevante que su respeto a los derechos del hombre.

La deutsche Welle publica los comentarios sobre el tema en la prensa alemana:

La cruz de Aygül Özkan

El Badische Zeitung, de la ciudad alemana de Friburgo: “Antes que nada, la cruz es expresión de la fe cristiana. De ahí que un salón de clases con un crucifijo esté marcado por el cristianismo en lugar de propiciar una visión neutral del mundo. La propuesta de la nueva ministra de Asuntos Sociales de Baja Sajonia, Aygül Özkan, exige simplemente aquello que ya los expertos y los tribunales habían sugerido. Pero la Unión Demócrata Cristiana de Alemania (CDU) no solamente ha insistido en ignorar las consecuencias que la discusión trae consigo, sino que se ha ahorrado el trabajo de buscar contraargumentos: el debate deja de tener lugar porque le causa dolor de estómago a la mayoría de la población. A Özkan (CDU) se le pidió este lunes (26.4.2010) apegarse a la línea del partido, pero esto no evitará que, en el futuro, los democristianos y todos los demás se vean involucrados con mayor frecuencia en la discusión de este tema. Y está bien que así sea porque las mayorías no son de fiar.”

En Potsdam, Alemania, el Märkische Allgemeine: “Quizás se deba todo a un malentendido de ambas partes. La ministra de Asuntos Sociales de Baja Sajonia, Aygül Özkan, debió haber anticipado que su concepción de una estricta separación del Estado y la religión iba a encontrar resistencia en el seno de un partido cuyo nombre comienza por ‘C'. Y el partido en cuestión –el CDU– debería reflexionar y dejar claro qué tan seria es su oferta de propiciar la integración cultural. Si la Unión Demócrata Cristiana de Alemania realmente aspira abrirse de cara a los inmigrantes, debe demostrar que puede soportar debates como el que gira en torno a la presencia del crucifijo en las escuelas estatales. Pero si sólo se trata de mostrar migrantes ejemplares en sus filas para modernizar su imagen, entonces sólo está haciendo política simbólica. Vayamos al grano: si Aygül Özkan realmente cree en lo que dijo, la ministra está en el partido equivocado.”

El Frankfurter Rundschau, de Fráncfort del Meno: “Con su propuesta de retirar los crucifijos de las escuelas estatales, Aygül Özkan atravesó un campo minado, y lo hizo sin tener un mapa a la mano. Para iniciar un debate serio, Özkan ha debido presentarlo de otra manera y decirle a las iglesias: ‘Ustedes abusan de sus símbolos más importantes cuando permiten que se conviertan públicamente en meras viñetas alusivas a una mentalidad cristiana inconsistente '.”

La cruzada de Sarkozy contra el chador

El diario parisino independiente Le Monde: “La discusión acerca de la burka o el chador, el velo con el que las mujeres musulmanas se cubren de cuerpo completo, es una trampa puesta personalmente por el presidente, Nicolas Sarkozy, cuando en junio de 2009 anunció en Versalles que la burka no era bienvenida en el territorio de la república. Esta polémica puede revertirse en contra de quienes la han promovido. Un proyecto de ley como ese conducirá inevitablemente a situaciones de conflicto incontrolables. Al contrario de lo que dicen el jefe de Estado y sus ministros, ese proyecto puede también estigmatizar a la comunidad musulmana, la gran mayoría de cuyos miembros recomiendan resolver este asunto mediante la persuasión y la pedagogía.”

Editor: Enrique López Magallón

0 comentarios:

Publicar un comentario

Related Posts with Thumbnails